»»HABLANDO DE SEXO SIN TABUES ::: LA MUJER: SE VIENE O NO SE VIENE?

Primeramente saludos mis querid@s Traqueter@s. En esta ocasión les traemos la segunda entrega de nuestra sección: Hablando de sexo sin tabues... Esta vez trataremos el tema del orgasmo femenino y de la eyaculación femenina (lo que comunmente se le llama: venirse)

Estoy seguro que este tema lo han tratado al menos una vez en su vida. Sino ustedes directamente, al menos alguien dentro de un grupo en el que la conversación ha llegado de manera fugaz y espontanea. Al fin y al cabo sigue siendo un tabú para muuuchas personas esto de que si las mujeres se vienen o no se vienen, lo que en palabras finas y por cuestiones de etiqueta y protocolo se le ha decidido llamar: ORGASMO.

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A diferencia de los hombres, quienes en el 99.9999999999999999% vamos a tener una eyaculación, y llegada al éxtasis de placer visible y palpable, el orgasmo en la mujer dependera de distintos factores. El tipo de orgasmo, la duración, la intensidad, la repetitividad, etc.. varían en cada mujer y dentro de las circunstancias que a cada una le afectan. Dependerá del nivel de excitación, del tiempo que se haya estado estimulando previamente, de sus experiencias, de su estado anímico y emocional con la pareja, del tipo de estimulación, etc.

Acerca de la eyaculación... (que es lo que muucha gente define como: venirse)
La realidad es que la mayoría de mujeres no expulsan ninguna cantidad de líquido de sus vaginas en el momento del orgasmo. Hay algunas que sí que pueden llegar a expulsar un chorro con cierta potencia, de un líquido transparente, y en forma convulsiva. Pero es la minoría. Esto es lo mal llamado eyaculación femenina –squirt, en inglés-. Esta explosión de placer va acompañada de este líquido que tiene la composición de la lubricación general de la mujer, de sabor y olor dulzón, y que es segregado a través de unas glándulas que existen alrededor del clítoris.

Asi como la foto de la profesora fresca esa, las películas pornográficas son malas educadoras porque si se ven sin criterio se puede llegar a creer que lo que allí sucede es lo que se debe esperar de cada relación. Y nada más lejos de la realidad. Eso es sólo ficción y, lógicamente, hay cosas ciertas pero todo esta sobredimensionado, exagerado, y magnificado. Cada uno tiene sus reacciones y respuestas y es fácil funcionar de una manera con una pareja y de otra con otras. Por lo tanto, no creamos falsas expectativas porque los resultados pueden ser frustrantes.