La mayoría de los carajitos gringos desde chiquitos se vuelven adictos a jartarse de McDonalds, Burger King y otras yerbas aromáticas. Pero el caso de Kailyn, una carajita de 18 años de Sacramento California que desde los 11 años le ha cojido con comer plastico. Desde entonces
se ha jartado 12 controles remotos, 5,000 pulseras, mas de 100 tenedores desechables, alrededor de 1,000 decoradores de cocteles, 10 botellas de agua, 2 bobos, 3 cajas de Cd's, unas 50 perchas de ropa y mas de 50 sorbetes. Dale a play al video:
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via Remolacha
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