Esto le sucedió a un chamakito en la ciudad de Brisbane, Australia.
A un aburrío le dió con hackearle la cuenta al chamako y le envió invitaciones vía Facebook a mas de 4,000 personas para una fiesta casera que harían los padres de la víctima del ciber-ataque.
Cuando la familia del joven advirtió lo que había pasado ya era demasiado tarde. Una gran cantidad de personas se aglomeraban en la puerta de entrada de la casa, mientras decenas ivan llegando al party. Los padres del joven intentaron resolver el lio escribiendole a todo el mundo por Facebook que la invitación a la fiesta había sido una farsa, pero eso no les hizo ni cosquilla a la desenfrenada multitud.
Al final no tuvieron otra opción que escribirle a la policía via Twitter (oigan eta vaina =0) a lo que respondieron varias patrullas para dispersar los fiesteros.
via: LoBusca.com



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